El domingo 19 de febrero de 2023 pasará a los anales de la historia futbolera ibicenca y del CD Ibiza como uno de los días más injustos en la trayectoria deportiva del club.

Sobre las 14:10 del mediodía se materializaba el 1-2 en favor del Espanyol B, a escasos segundos de que el colegiado pitase el final del encuentro, certificándose así una derrota totalmente inmerecida para los de Manu Calleja.

Pero para poner en contexto, hablemos del partido. El encuentro empezaba a las 12 de la mañana con puntualidad inglesa, y comenzaba con los catalanes más enchufados y metidos en el partido. De hecho la primera ocasión del encuentro fue al iniciar el encuentro que tras varios pases y un centro lateral, un jugador perico remató y puso en apuros a Isma Gil que prácticamente aún estaba poniéndose los guantes.

Tras esto el partido fue cogiendo tintes rojos. La posesión, las ganas, el esfuerzo y las ocasiones las fue poniendo el Cedé de la mano de Marc Mas, Barace e Iker Hernández. Ocasiones con no excesivo peligro pero que cada vez se repetían más en el tiempo.

En el minuto 20 y en una ocasión aislada, el conjunto filial se puso por delante en el marcador, asestando un jarro de agua fría a un CD Ibiza que estaba mejor y creando más que el rival, y que el gol no hizo mella, ya que se mantuvo el estilo y las ganas.

Pero como tónica general en el partido, el Cedé tuvo que remar de nuevo, esta vez contra una polémica decisión arbitral ya que sacó roja directa a Imanol Barace tras una jugada desafortunada en la que el extremo rojillo levantó la pierna por encima de la cintura mientras se daba la vuelta, con la mala suerte que el defensa rival impactó y el árbitro entendió que este acontecimiento era roja clara. Sin duda la acción es desafortunada, pero también es cierto que el 7 rojillo estaba de espaldas al balón y al rival, por lo que no podía saber dónde se ubicaba el rival. En cualquier caso y tras varios fueras de juego inventados y esta expulsión directa, el CD Ibiza fue altamente perjudicado por decisiones arbitrales. Y no serían las únicas.

El partido se iba a la ducha con resultado a favor de los pericos pero la sensación de que el Cedé incluso con uno menos estaba mejor ubicado en el campo. Y con el comienzo de la segunda parte se demostró, ya que Marc Mas no tardó más que 3 minutos en poner las tablas en el marcador tras poner el balón en la red un cabezazo previo de Julen López.

La segunda parte vino cargada de más contención y táctica, ya que los locales se encontraban con un jugador menos y, si bien hubo un par de ocasiones claras, el rival jugó muy bien en defensa y el portero estuvo atento a todo.

En los minutos finales del encuentro pasó todo lo que no logró ocurrir en los 40 minutos anteriores. Primero por una ocasión clarísima del Espanyol B que se marchó rozando el palo largo. Después por una jugada rojilla en la contra de un saque de esquina en la que Pol Ballesteros acaba internando al área pero no logra una buena ubicación para poner el balón en la red. Y escasos minutos antes del pitido final, el linier y el árbitro deciden no pitar una mano clarísima en el área rival que habría cambiado totalmente una película que acabó con derrota local.

El entrenador, Manu Calleja, en rueda de prensa posterior tras el encuentro dijo que «no puedo decir nada más a los chicos que felicitarles por el encuentro a pesar del resultado, ya que en 20 años que acabo de cumplir como entrenador, nunca había vivido una injusticia tan grande en un resultado».

El equipo rojillo sigue sumando jornadas en busca de salir de la zona de descenso. Esta derrota es la primera en las 5 jornadas que llevamos de segunda vuelta, donde hasta ahora llevábamos un balance de 2 victorias y 2 empates. La próxima jornada jugaremos en Pinilla ante el Teruel, líder de la categoría. El CD Ibiza buscará dar la sorpresa y salir de la zona complicada.

Durante el descanso del encuentro y continuando con los homenajes que hace el club a miembros de «Sa Deportiva» en los partidos como local, se entregó una placa a los ex jugadores José Marín Recio y Ángel Vega Martín por su contribución al club.